Día 1: Transformación Personal
¿Qué realmente pasa cuando me decido a seguir a Jesús?
Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado, una nueva vida ha comenzado!
Al tomar esta decisión crucial:
- Tu reconoces que has vivido separado de Dios y deseas cambiar.
- Tu te arrepientes, volviéndote a Dios y lejos de tu antigua manera de vivir.
- Tu recibes a Jesucristo como tu Salvador y Señor.
La Biblia describe esta transformación de esta manera: de la oscuridad, a la luz; de la esclavitud, a la libertad; de la muerte, a la vida.
¡Vaya! Una vez tu decides seguir a Jesús, pensarías que los cielos nublados se aclararían, que los rayos del sol sobre abundarían y que no tendrías más problemas. Pero esa no fue mi experiencia. Yo no me sentí muy diferente el primer día. Sin embargo, pronto descubrí una nueva paz, seguridad y gozo interior, a medida que permitía a Cristo guiar mis pensamientos y decisiones.
Supongamos que compras un auto y te encuentras con la sorpresa de que le falta la batería. Bueno, podrías simplemente admirar tu preciada posesión e incluso subirte al auto e imaginar que lo conduces. Pero sin la batería, tu bello auto nuevo no se moverá. Nuestras vidas son así cuando no tenemos a Jesús en ella. Pero con Él como nuestra “fuente de energía” podemos ser la persona que Él diseñó que nosotros seamos.
Ya sea que apenas acabas de recibir a Cristo en tu vida o llevas ya buen tiempo en los caminos de Dios, no te desanimes si no notas cambios inmediatos. ¡El crecimiento espiritual requiere cambios! Con Cristo en tu vida, los cambios se darán. Tu eres una nueva persona. Tu has comenzado una nueva jornada.
¿Qué harás hoy que te acercará más a Dios. ¿Necesitas ideas?