Belleza Exterior y Belleza Interior
¿Qué es lo que se refleja a través de una persona que realmente conoce a Jesús y camina con Él?
No se interesen tanto por la belleza externa: los peinados extravagantes, las joyas costosas o la ropa elegante. En cambio, vístanse con la belleza interior, la que no se desvanece, la belleza de un espíritu tierno y sereno, que es tan precioso a los ojos de Dios.
Impresiones que permanecen
¿Has visto a una persona que es bien atractiva físicamente; alguien que "detiene el tráfico"? Las personas que reflejan la belleza que viene de parte de Dios también provocan una gran impresión, pero son prontamente olvidadas cuando la próxima persona atractiva pasa por el lado.
¿Qué tal la persona que realmente conoce a Jesús y camina con Él? La gracia y la misericordia de Dios se reflejan en esta persona y como resultado él o ella habla y actúa de tal manera; animando y sirviendo a los demás entre otras. Pero y las demás personas, ¿prestan atención cuando alguien vive de esta forma? Tal vez no lo notemos al principio, pero sus obras que reflejan a Dios, dejan una impresión de bondad y las vidas de las personas pueden cambiar debido a ello.
Los dos tipos de personas descritas anteriormente dejan una impresión. Pero solo la segunda puede impactar a otros con consecuencias eternas.
Impresión Pasajera vs. Impresión Duradera
La Biblia nos dice que “Engañoso es el encanto y pasajera la belleza; la mujer que teme al Señor es digna de alabanza” (Proverbios 31:20). Dios quiere que los hombres y las mujeres nos preocupemos más por nuestro carácter y nuestra belleza interior que por nuestra belleza exterior.
La cita bíblica de hoy nos dice que no prestemos tanta atención a la belleza exterior, pero que cultivemos “la belleza interior, la que no se desvanece, la belleza de un espíritu tierno y sereno” (1 Pedro 3:3-4). No hay nada malo con que quieras verte bien, pero debemos recordar que la belleza exterior y su impacto se desvanecen rápidamente. Pero la belleza interior crece a lo largo de la vida, de tal forma que la gente nota tu carácter en vez de tu apariencia. Y esto, glorifica a Dios.
Vida Eterna
Cuando compartimos del amor de Dios con otros les ayudamos a encontrar vida eterna: “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16). Y “Ciertamente les aseguro que el que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna y no será juzgado, sino que ha pasado de la muerte a la vida” (Juan 5:24).
En agradecimiento al amor de Dios y por la obra que Su Espíritu Santo hace en nosotros, podemos dejar que Dios nos use para cambiar el destino eterno de alguien en vez de solamente dejar una impresión fugaz de belleza.
Permítele que te Use
¿Cómo entonces podemos dejar que Dios nos use para ayudar a los demás a encontrar la vida eterna? Primero, sigue a Jesús y vive tu fe diariamente a través de la oración, preocupate por las personas a tu alrededor y comparte acerca de Jesús en cada oportunidad que tengas. ¡Desarrolla el hábito de hablar del Señor con otras personas!
Segundo, está atento para poder identificar a creyentes a tu alrededor que anhelan seguir los mandamientos de Jesús, pero no saben cómo. Algunos creyentes no han aprendido cómo compartir las Buenas Nuevas. ¡Usa lo que has aprendido y enséñales a otros a compartir acerca de Jesús también!
Ora esta semana:
Señor, deseo compartir Tu amor con otros. Por favor, ayúdame a siempre seguir Tu ejemplo de gracia y misericordia con los demás y ayudarles a recibirte en sus vidas. Amén.