El Significado del Domingo de Ramos… Dios Viene a Nosotros
Él quiere que le veas.
¡Llénate de alegría, hija de Sión! ¡Da voces de júbilo, hija de Jerusalén! Mira que tu rey viene a ti, justo, y salvador y humilde, y montado sobre un asno, sobre un pollino, hijo de asna.
¿Cómo se da a conocer a Sí mismo el Rey del Universo?
Porqué Él viene…
Dios tomó la decisión de entrar en nuestro mundo. Eligió un momento y un lugar determinado para entrar en la humanidad. Eligió limitarse a sí mismo convirtiéndose en un niño indefenso. Piensa en cómo sería tener la capacidad de elegir cuándo, dónde y de quién nacer. Dios vino al mundo para darse a conocer a todos. Dios quería mostrarnos Su amor. “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16). Jesús eligió convertirse en una persona limitada para poder identificarse en amor con nosotros. Puede ser difícil para nosotros entender esto.
Sobre un asno…
El Domingo de Ramos, Jesús vino a Jerusalén. Mientras Jesús vivía en la Tierra, era tradición que los gobernantes hicieran desfiles para mostrar su realeza. Pero Jesús vino en un asno humilde, no muy elegante ni grandioso. Se anunció públicamente a Sí mismo como rey de la gente de Su época mientras estaba sentado en un asno. “¡Llénate de alegría, hija de Sión! ¡Da voces de júbilo, hija de Jerusalén! Mira que tu rey viene a ti, justo, y salvador y humilde, y montado sobre un asno, sobre un pollino, hijo de asna” (Zacarías 9:9). Jesús siguió todo lo que estaba escrito sobre él en el Antiguo Testamento en Su gran presentación. “Porque de cierto les digo que, mientras existan el cielo y la tierra, no pasará ni una jota ni una tilde de la ley, hasta que todo se haya cumplido” (Mateo 5:18).
El significado del Domingo de Ramos fue para mostrarnos quién es Él.
¿Cómo podríamos realmente saber lo que Dios ha hecho por nosotros? Él entró al mundo como un niño humilde, un siervo humilde, un rey justo, un sacrificio completo y un hermano perfecto. Él se ha dado a conocer perfectamente en Sus acciones, Sus palabras, Su presencia, Su amor y Su perdón. Él es perfecto. “... en estos últimos días, nos ha hablado por medio de su Hijo. Dios le prometió todo al Hijo como herencia y, mediante el Hijo, creó el universo. El Hijo irradia la gloria de Dios y expresa el carácter mismo de Dios, y sostiene todo con el gran poder de su palabra” (Hebreos 1: 2-3). Esto nos dice que Jesús nos está mostrando perfectamente quién es Dios. Este es el significado del Domingo de Ramos.
Ora esta semana:
Señor, por favor guíame para recibirte hoy, en todo Tu perfecto conocimiento, amor, perdón y sabiduría. Muéstrame quién eres, ¡quiero conocerte! ¡Ayúdanos a ver quién eres Señor!