Términos Bíblicos: Entendiendo a Dios - Parte 2

Continuando con la segunda parte de nuestro estudio, hoy definiremos 6 términos más que nos pueden servir para aclarar dudas con respecto a fundamentos Bíblicos o simplemente ser de utilidad cuando hablamos con otras personas acerca de Jesús.

SALVACIÓN

Después de que el pecado entró en el mundo, cada ser humano quedó esclavizado por la corrupción y la muerte. El Hijo de Dios vino a rescatar a la humanidad al pagar el precio por dicho pecado. La obra necesaria para obtener la salvación fue completada. Ahora Jesucristo nos ofrece la salvación de forma gratuita, es decir, el rescate de la muerte a la vida eterna, para todos aquellos que pongan su fe en Él.

REGALO

Un verdadero regalo no se gana, solo se acepta. La salvación es un regalo inmerecido de Dios, que se recibe al creer en Él.

FE

La fe es depositar tu confianza en lo que no necesariamente puedes ver o probar. La fe es esencial para la vida eterna. Cuando recibimos a Jesucristo como Señor y Salvador, estamos ejerciendo nuestra fe al entender que Él es el camino al Cielo y Aquel que nos hace hijos de Dios. Debido a que no podemos ver a Dios ahora, vivimos nuestras vidas por fe. Tu fe será suficiente siempre y cuando esté puesta en Él.

NACIDO DE NUEVO

El término “Nacido de nuevo” describe a una persona cuyo espíritu ha cobrado vida al creer en Jesucristo. Primero nacemos físicamente, luego nacemos de nuevo espiritualmente. Nuestro espíritu vive por la eternidad incluso cuando nuestra vida física culmina.

CONFESAR

Confesar puede significar admitir un error o estar de acuerdo en que algo es correcto. Ambas cosas deben suceder, en nuestra relación con Dios. Dios ha prometido que si una persona reconoce la verdad de la deidad de Jesucristo, Dios perdonará su pecado.

ARREPENTIMIENTO

Arrepentirse es dejar de hacer el mal, es ir en dirección opuesta al pecado y mover nuestro corazón, mente o cuerpo en la dirección que la Biblia nos indica que es la correcta. Es cambiar de un autogobierno al gobierno de Dios. El arrepentimiento es apartarse del pecado que nos separa de Dios y en su lugar, buscar el perdón de Dios y la nueva vida que Él ofrece.