Lectura 1: Estar Seguro
El poder y la promesa de Dios te da la seguridad de tu salvación.
¿Cómo puedes estar seguro de que aceptaste a Cristo?
Un seguidor de Cristo es una persona que ha creído en Dios y ha tomado la decisión de recibir a Jesucristo, el Hijo de Dios, para que sea su Señor y Salvador. Dios envió a Su Hijo Jesucristo al mundo a morir por nuestros pecados. Todos nosotros hemos hecho, dicho o pensado cosas malas. Esto se le conoce como pecado, por el cual nosotros merecemos ser castigados. La buena noticia es que Dios envió a Su Hijo Jesucristo a morir en la cruz por nuestros pecados.
“Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16).
¿Qué significa "ser salvo"?
Cuando crees firmemente que Jesús es el Hijo de Dios, que vino a la tierra a vivir una vida libre de pecado y que murió en la cruz para pagar por tus pecados, cuando le pides con sinceridad que sea tu Señor y Salvador y que te perdone tus pecados, tú estás aceptando a Cristo como tu Salvador. Ser salvo significa que has sido salvado de tus propios pecados, que tienes a Cristo en tu corazón.
"pero a todos los que creyeron en él (Jesús) y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios" (Juan 1:12).
Cuando aceptas a Cristo en tu vida, como tu Salvador, te conviertes en un hijo de Dios. Al arrepentirte de tus pecados y pedirle perdón, Dios te perdona y te da el regalo de la vida eterna con Él. Tú puedes darle las gracias a Dios todos los días por este regalo maravilloso; una nueva vida en Cristo.
"pero a todos los que creyeron en él y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios. Ellos nacen de nuevo, no mediante un nacimiento físico como resultado de la pasión o de la iniciativa humana, sino por medio de un nacimiento que proviene de Dios” (Juan 1:12-13).
Nadie es cristiano por ser perfecto, porque sabemos que en esta vida desafortunadamente, nunca seremos perfectos. Esto te incluye a ti. Nadie es cristiano tampoco por asistir a la iglesia. Esto no significa que no debas asistir, sí debes para poder crecer espiritualmente. Pero eso no te hace un cristiano. Un cristiano no es alguien que haya dicho una oración o que haya crecido en una familia cristiana. Todo eso es parte de lo que experimentamos como cristianos pero no nos hace cristianos. Solamente eres cristiano porque le has pedido a Jesucristo, de todo corazón, que sea tu Señor y Salvador y arrepentido de tus pecados, le has pedido que te perdone.
La Salvación Nunca se Pierde
En el momento en que das ese paso de fe descrito anteriormente, eres salvo y esto es un regalo de Dios. La Biblia nos dice en Romanos 11:29, que "los dones de Dios y su llamado son irrevocables". Eso te hace ser redimido, ser hijo de Dios y tener la vida eterna. La vida eterna, tal y como la misma palabra lo establece, es eterna, no es temporal. Y el convertirte en hijo de Dios es para siempre; nada ni nadie puede separar a un cristiano del amor de Dios (lee Romanos 8:38-39 y Juan 10:28-29). Dios te ama y quiere que seas Su hijo desde ese momento y para siempre. ¡Nunca lo olvides!