Lectura 22: Como Una Familia

Desde el principio, Jesús hizo a Sus seguidores tan especiales como Su propia madre y hermanos. "Luego señaló a sus discípulos [Jesús] y dijo: «Miren, estos son mi madre y mis hermanos. Pues todo el que hace la voluntad de mi Padre que está en el cielo es mi hermano y mi hermana y mi madre»" (Mateo 12:49-50). Es por eso que nos podemos llamar unos a otros "hermanos" y "hermanas" en Cristo.

"Preocupémonos los unos por los otros, a fin de estimularnos al amor y a las buenas obras. No dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día se acerca" (Hebreos 10:24-25).

¿Qué es una Familia?

Piensa en todas las ventajas de una familia. Una familia provee un lugar acogedor y seguro que puedes llamar hogar. Te da sentido de seguridad e identidad, y te enseña la diferencia entre el bien y el mal. Tu familia te alimenta y te viste. Es en una familia que aprendes a amar a tus hermanos y respetar a tus padres. Es en una familia que descubres quién eres y cómo puedes aportar al mundo.

“Me alegré cuando me dijeron: «Vayamos a la casa del Señor»" (Salmo 122:1).

Nos Necesitamos Unos a Otros

Dios quiere que tengas una familia espiritual en una iglesia local. No se puede esperar que bebé pequeño se alimente por sí mismo, se cambie el pañal y aprenda todas las cosas que necesita saber como un adulto. Así mismo, Dios sabe que necesitas la guía de un pastor, el cuidado de otros cristianos y la seguridad y el apoyo de una buena iglesia para ayudarte a crecer como cristiano. Mira lo que la Biblia dice al respecto: "Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno cae, el otro puede darle la mano y ayudarle; pero el que cae y está solo, ese sí que está en problemas. Del mismo modo, si dos personas se recuestan juntas, pueden brindarse calor mutuamente; pero ¿cómo hace uno solo para entrar en calor? Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente" (Eclesiastés 4:9-12).

“Todos los creyentes se reunían en un mismo lugar y compartían todo lo que tenían" (Hechos 2:44).

Busca a Jesús y ten Cerca a Tu Familia Espiritual.

¿Te reúnes con otros creyentes regularmente? Si no lo haces, pídele a Dios que te ayude a encontrar una iglesia de sana doctrina o un grupo de creyentes maduros para reunirte con ellos. Él sabe cuán desesperadamente necesitas estar conectado con otros seguidores de Jesús y tener una familia espiritual. Y si ya la tienes, pídele a Dios que te hable acerca de la familia de la iglesia que tienes y cómo puedes contribuir a ella.

A continuación, lee acerca de cómo funciona la iglesia.

Lectura 23: ¿Cómo Funciona?