Lectura 15: Un Patrón Diario
Como cristianos, es importante que desarrollemos un patrón diario de oración y estudio de la Biblia.
¿Alguna vez has escuchado el dicho: “la práctica hace la perfección?” Quizás has intentado comer saludable anteriormente o comenzar una rutina de ejercicios. Si lo has intentado, sabes que los resultados no se obtienen de la noche a la mañana, sino siendo consistente para obtener un resultado que perdure. Esto mismo ocurre al leer la Biblia. Como cristianos, es importante que desarrollemos un patrón diario de oración y estudio de la Biblia. Entonces veremos los resultados de obedecer la Palabra a lo largo de toda nuestra vida. El apóstol Pedro dijo en 2 Pedro 3:18 que debemos “crecer en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo”. El crecimiento espiritual es como el crecimiento físico; requiere de una fuente de nutrición. Jesús dijo de sí mismo, “Yo soy el pan vivo que bajó del cielo. Si alguno come de este pan, vivirá para siempre” (Juan 6:51). Así que para nosotros poder recibir las bendiciones de nuestra relación con Dios, debemos todos los días, apartar un tiempo con Él en el estudio de Su Palabra de manera que podamos crecer en nuestra fe.
Aparta un Tiempo Cada Día
No necesitas un tiempo prolongado, pero si ayuda, que seas consistente en tu tiempo. Por ejemplo, temprano en la mañana antes del trabajo, ora antes de leer y pídele al Espíritu Santo que sea tu maestro. Ten papel y lápiz a la mano, escribe lo que has aprendido, y lee de nuevo tus notas como recordatorio de lo que el Espíritu Santo te ha enseñado. Pon en práctica lo que has leído. Si leíste esta mañana sobre amar a tus enemigos, intenta ser amable con esa persona que ha sido mezquina contigo ese día.
“Las cosas que se escribieron antes, se escribieron para nuestra enseñanza, a fin de que tengamos esperanza por medio de la paciencia y la consolación de las Escrituras” (Romanos 15:4).
“Tú desde la niñez has conocido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús” (2 Timoteo 3:15).
Un Buen Lugar Para Comenzar
El paso más importante es comenzar. Un buen punto de partida es el Evangelio de Juan. Comienza a leer el libro completo como si estuvieras leyendo una carta escrita por un buen amigo. Luego, puedes leerlo desde el principio, un capítulo cada día por los próximos 21 días. Mientras lees, aprenderás mucho de Jesús, y Dios le estará hablando a ti. Tenemos voluntarios en línea, dispuestos a ayudarte con cualquier pregunta que puedas tener. Te puedes conectar y escribirle en cualquier momento, y compartirle acerca de las cosas que Dios te ha estado enseñando y el gozo que proviene de estar creciendo en tu relación con Dios.